La madre del delantero campeón del mundo Ángel Correa murió este jueves tras una intensa batalla contra el cáncer. El fallecimiento de Marcela Martínez conmueve al mundo del fútbol. El delantero había hecho pública la enfermedad que atravesaba su madre en los últimos años y hoy debió despedirse de ella.
En la cuenta oficial de Twitter de San Lorenzo se confirmó el fallecimiento de la mujer con sentidas palabras hacia quien fuera figura del Cuervo en sus comienzos: «Lamentamos profundamente el fallecimiento de Marcela Martínez, madre de nuestro querido Ángel Correa. Acompañamos a Angelito y a toda su familia en este momento de tanto dolor. ¡Siempre junto a vos, campeón! ¡Mucha fuerza!», escribió el Ciclón.
Esto generó que muchos se enteraran y rápidamente se acercaran con un mensaje de amor y apoyo al joven de 28 años, en este difícil momento.
Algunos días atrás, el jugador había dado una entrevista al sitio Goal en donde se refirió a Marcela como «la persona más importante» de su vida. Seguidamente, había afirmado que su madre era «una guerrera», entre muchos otros elogios: «Tanto mi madre como mis hijas son muy importantes. Toda mi familia. Nuestra fuerza es nuestra Marcela, mi madre. A pesar de que lleva ya tres años luchando contra el cáncer, sigue con nosotros, luchando contra esa enfermedad, luchando cada día. Mi madre me llena de orgullo y la llenamos de fuerza para que siga viviendo», confesó.
Sin lugar a dudas, la mujer era uno de los grandes pilares del futbolista y la muestra de ello es un mensaje que él mismo le había dejado en redes sociales cuando ella supo que padecía cáncer: «No hay tregua para tu enemigo en el campo de batalla, pueden tocar tu cuerpo, pero tu alma es intocable, aunque desgarren tu carne, tu fe es inquebrantable. No te robarán quién eres, tu espíritu es más fuerte. Esta guerra la tienes ganada. Sos nuestra guerrera. Te amamos, má».
Una vida dura
Tristemente, hoy le toca atravesar la pérdida de su mamá. Pero no es el único dolor que el jugador de 28 años vivió a lo largo de su vida: a sus diez años, sufrió la muerte de su papá y en 2017 se suicidó Luis, uno de sus hermanos.
Al pasar de San Lorenzo al Atlético Madrid en 2014, los estudios de rutina revelaron que padecía una anomalía cardíaca, por la que debió ser operado en Nueva York. Luego de un tiempo, reveló que había decidido no contarle a su mamá de aquella intervención: «Le dije que había ido a pasear».
Luego, cuando a su progenitora le detectan cáncer en el año 2020, el delantero decidió raparse con la finalidad de acompañar el duro proceso que Marcela enfrentaría con el tratamiento de quimioterapia y rayos.
Fuente: Minuto Uno
